Blas de Lezo fue uno de los almirantes más influyentes en su época, reconocido por ser un hombre que dio todo de si, para ganar todas las batallas, ademas, se le recuerda por sus grandes hazañas en las diversas batallas que dirigió.
Información personal
Se trata de un reconocido almirante de origen Español, el cual es reconocido historicamente por todas las hazañas que realizo en las batallas que fueron dirigidas bajo su mando.
Su nombre completo era Blas de Lezo y Olavarieta, nacido el 3 de febrero de 1689 en la antigua Oyarzo, al pie de Monte Ulía, en el país Vasco; posteriormente fue bautizado en la iglesia de San Pedro de Pasajes el día 6 de Febrero del año 1689; naciendo como nieto del Capitán Pedro de Lezo, el cual había ganado ejecutoría de nobleza en el año 1657, su padre fue Pedro Francisco de Lezo y su madre Agustina de Olavarrieta, los cuales hicieron sus votos matrimoniales en 1683. Su crianza fue tranquila, a orillas del mar Cantábrico, el cual era un hogar de marineros que era reconocido por tener un aire de cuentos fantásticos sobre pesquería y viajes fabulosos a través de las aguas del mar.
Fue un almirante español que fue mayormente reconocido por sus múltiples heridas de guerra; era considerado uno de los más tenaces estrategas de la historia de la Armada Española; a los 13 años de edad ingresó como guardia marina en la Armada franco-española, en la guerra en la cual se estaba suscitando la sucesión del trono español, todos sus estudios los adelantó en Francia y su primera vez sirviendo fue en la flota del primer almirante El Conde de Tolosa, en la batalla de Vélez-Málaga.
En el año 1704 el 24 de agosto, Blas de Lezo que para ese entonces era solamente un adolescente perdió su pierna izquierda, posterior a esto fue ascendido a alférez de alto bordo, realizando de ahí en adelante sus actividades con una pierna hecha de madera; un año después y luego de adaptarse a su limitación física sirvió entusiasmado como alférez de navío y fue al socorro de Peñíscola y después de un año de esto custodió a algunos convoyes que fueron enviados desde Francia a Felipe V, en este mismo año de Lezo incendió por primera vez un barco, el cual era denominado como el Resolution a las cercanías Ventimiglia.
En el año 1707, luego de dos años manteniéndose relativamente ileso en todas sus batallas, perdió su ojo izquierdo, sin embargo continuó su servicio con tenacidad, ascendiendo de esta manera un año después a teniente de navío en el puerto de Rochefort y dos años después volvió a ascender a Capitán de fragata.
Durante el reinado de Felipe V fue participe de múltiples acciones navales, sumándole a esto que organizó la protección de los dominios españoles de Chile y Perú, posicionándose contra los piratas de la época, aunado a esto, dirigió la toma de Orán en el año 1732, para el año 1741 ya era Comandante General de Cartagena de Indias, por lo cual fue uno de los primeros que salió a defender la ciudad del ataque de los ingleses, junto al virrey Sebastián de Eslava; acción por la cual tomo mucha fama y mucho honor.
Murió el 7 de septiembre del año 1741, no a causa de guerra, ya que cuando iba a las batallas este parecía tener más de 7 vidas, murió a causa de dolores físicos y morales, ya que el virrey de la época le había puesto en culpa por todos los desastres que se hicieron a causa de la guerra.
Fue un almirante que hizo hasta lo imposible para poner el nombre de su nación en alto, uno de los mejores estrategas y marinos que hayan existido para su época, especializándose y siendo activo en diversas batallas que le costaron varias partes de su anatomía, sin embargo, eso jamás lo detuvo en su ascenso hasta llegar a ser Comandante General.
Su defensa fue una de las más acertadas contra los ingleses, ya que los navíos y recursos de Cartagena de Indias para aquél entonces estaban en una gran desventaja ya que solo contaban con 6 navíos de línea, 7 galeones de comercio y algunas embarcaciones menores, mientras que los enemigos contaban con más de 140 naves, de las cuales 36 eran navíos y el resto fragatas, transportes, brulotes y bombardas.
No obstante, la estrategia de Blas de Lezo fue tan precisa, que con seis navíos venció a los ingleses, no quedó ni un navío en pie, pero logró la victoria que tanto anhelaba con su carácter temerario.
Blas de Lezo era un hombre de tez pálida y contextura gruesa, su estatura era promedio, se vestía la mayoría del tiempo elegantemente; como ya se mencionó anteriormente perdió en batalla su brazo derecho, su ojo izquierdo y su pierna izquierda, la cual fue reemplazada por una pierna totalmente de madera.
Su semblante siempre era serio y frío, por las mismas consecuencias de la guerra y las experiencias que vivió en estas batallas, aunque exceptuando esto, era un hombre que desde muy temprana edad, anhelaba una profesión la cual se propuso obtener, lo cual termino cumpliendo y ejerciendo. Su perseverancia y valentía lo llevaron a cumplir todo aquello que se proponía, entre ello navegar y proporcionar justicia a todos quienes en el buscaban ayuda. Al pasar los años sufrió las pérdidas de sus extremidades eso no lo detuvo y siguió su camino hasta llegar a Comandante General.
Algunos guipuzcoanos solían definirlo en vascuence como ankamortz, esta palabra significaba medio hombre. Este apodo se debía a que en distintas guerras y batallas en las cuales había formado parte, perdió muchas de sus extremidades y partes de su cuerpo, tales como su pierna izquierda, su brazo derecho y su ojo izquierdo, siendo ya que a los 25 años de edad se encontraba casi con solo la mitad de un cuerpo.
Uno de los monumentos de Blas de Lezo que más se reconocen, es el siguiente, el cual se lo hicieron en la ciudad que él salvó de las manos inglesas:
Calderón, Grecia. (2019). Blas de Lezo. Recuperado el 24 febrero, 2024, de Euston96: https://www.euston96.com/blas-de-lezo/