Para garantizar su supervivencia, los humanos tuvieron que diversificar sus dietas a la hora de escoger una vida sedentaria. La ganadería es una de las más importantes, y una de las más viejas es la caprina. Sobre este grupo de animales domésticos hablaremos hoy.
Los caprinos son grupo de animales normalmente asociados a las cabras. Son animales de naturaleza rumiante y artiodáctilo. Son herbívoros, y desde hace muchos siglos fueron objeto de crianza y explotación por el hombre. Su mayor índice de explotación se encuentra en la India y China.
Los caprinos son uno de los grupos de criaturas con mayor nivel de expansión geográfica. Tienen una excelente capacidad de adaptación a diversos entornos y hábitats, algunos de ellos, muy hostiles para otros mamíferos.
Se trata de un animal rumiante. Esto quiere decir que su alimentación sigue dos tiempos. En un primer momento, ingieren el alimento. En el segundo, lo devuelven a la boca para remasticarlo y salivarlo nuevamente.
Se trata, también, de un animal artiodáctilo. Eso significa que cada uno de sus miembros o apéndices desemboca en dos dedos sobre los que el cuerpo se apoya alternativamente.
Por lo general, presenta cuernos curvos. Estos son, quizá, un resultado de la evolución que les ha garantizado su supervivencia.
Su explotación es algo principalmente orientado a la adquisición de sus carnes y leches, las cuales son bastante demandadas en gran parte de la población mundial. Sin embargo, también es objeto de demanda su cabello y su cuero.
Se trata de una especie con un cuerpo delgado y de baja talla. Está especialmente saltar y trepar zonas especialmente empinadas y de difícil acceso para animales terrestres.
Es común que en algunos países se denomine al macho como “macho cabrío”, en tanto que a las crías más jóvenes se las suele llamárseles como “cabrito” o “chivo”.
Sus raíces etimológicas las podemos encontrar en el latin caprinus, el cual puede significar “relativo a cabra, pluso irregular, que salta como cabra”. Uno puede detectar sus raíces en el griego y otras lenguas indoeuropeas, pero todas, de alguna forma, nos remiten a la figura de las cabras y carneros. Esto puede deberse a que la ganadería caprina fue bastante común en zonas mediterráneas de europa durante la antigüedad.
Se dice que su evolución, de carácter incierto, podría rastrearse desde hace más de 10000 años en el pasado. Se cree que fue de los primeros animales domesticados por el hombre, muy probablemente debido a su versatilidad y capacidad de adaptación a gran cantidad de ambientes. Algunos de los primeros especímenes domesticados fueron la capra aegagrus y la capra ibex. Esto se sabe gracias a los descubrimientos de restos arqueológicos en asia occidental que dan testimonio de este hecho.
Tal como en muchas otras especies que son objeto de ganadería, los caprinos pueden ser divididos en función de sus utilidades para el hombre. Por esta razón, decimos que los tipos de caprinos conocidos son:
Las cuales son destacadas por su alta producción de leche y el temperamento optimo que tienen para esta tarea.
Se tratan de las razas cuyas condiciones corporales les permiten proveer al humano la carne necesaria para su consumo. Son razas con una buena cantidad de masa corporal, la suficiente como para ser atractivos para su consumo.
Son todas las razas cuya cantidad de carne es tan grande como la cantidad de leche que es capaz de producir. Se las llama “doble propósito” debido a que pueden atender ambas demandas (de leche y de carne).
Se refieren a las razas demandadas por su cabello. El pelo de algunas cabras es muy solicitado por sus características sedosas y suaves.
Algunas de las razas que podemos encontrar entre los caprinos son:
Como tal, son uno de los grupos de animales más versátiles de la naturaleza. Pueden encontrar hábitat en sitios donde otros rumiantes no pueden, como los bovinos. Por tal razón, se pueden encontrar cabras en zonas montañosas y de difícil acceso, al igual que en otras mucho más cercanas al nivel del suelo. Lo normal es localizarlas en zonas frías, en donde estas parecen sentirse más cómodas y a gusto. Por lo general, evitan los terrenos cenagosos.
Son animales herbívoros. Lo común es que su alimentación se base en todo aquello que puedan pastar. Algunos caprinos de zonas montañosas se benefician de la hierba y los arbustos que encuentran, al igual que de la zarza, espinos y otras hierbas que se puede encontrar en terrenos mucho más estériles.
Son animales vivíparos, por lo que las crías pasan alrededor de varios meses en gestación. Por lo general, los machos cabríos y las hembras están en edad reproductiva a partir de los dos años de edad. Lo recomendado suele ser que esta se dé a partir de los tres años, momento a partir del cual estarán más aptos para esta tarea. Se sabe que, ya a los seis años, los machos se hallan más débiles, y sus crías devendrán un tanto más defectuosas.
La ganadería caprina es muy antigua. Es posiblemente de las primeras que se han visto en estudios arqueológicos, en el sentido de su antigüedad. La crianza de cabras ha sido un tanto descuidada hasta hace poco. Se procura que estos estén en las condiciones climáticas más óptimas, para que su producción de leche, carne y pelo sea adecuada. Se está, se pueden obtener productos como la leche o el queso de cabra, o la carne de carnero.
Algunas de las enfermedades que podríamos nominar para esta población de animales son:
No es solo un animal cuyo destino se ha centrado en la ganadería y en su explotación. Su representación en la cultura ha sido una constante en gran parte de la cultura occidental. Sobre todo lo relacionado a la vida pastoril, podemos encontrar animales caprinos en representaciones religiosas, literarias, cinematográficas, etc. Son, además, fuente de productos altamente demandados en la sociedad, como son algunos tipos de queso y de leche.
Algunas de las empresas destinadas a la producción de ganadería caprina española son:
Calderón, Grecia. (2019). Caprinos. Recuperado el 23 febrero, 2024, de Euston96: https://www.euston96.com/caprinos/