Se sabe por medio de antiguos textos legales, literatura, papiros, tabletas de cera e inscripciones, que la ley romana se encargaba de cubrir diferentes facetas de la vida cotidiana del pueblo de Roma, tales como el crimen y castigo, propiedad de tierras, comercio, industria marítima y agrícola, ciudadanía, sexualidad y prostitución, esclavitud y todo aquello relacionado con políticas locales y estatales, responsabilidad y daños a la propiedad, y buscaba la paz. La ley se logró establecer por medio de diferentes métodos, por ejemplo, estatutos, decisiones de los magistrados, edictos del emperador, votos de la asamblea, plebiscitos y las deliberaciones de asesores legales expertos. Se volvieron multifacéticos y flexibles para lidiar con los diferentes cambios del mundo romano, y pasaron de la política republicana a la imperial, del comercio local al nacional y del estado a la política interestatal.
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El derecho romano es el grupo de principios de derecho que se han encargado de dirigir de generación en generación por medio de tradiciones, leyes y normas a la sociedad romana desde que fue fundada hasta que cayó como imperio.
El derecho romano consistió en una serie de diferentes reglas y normas de aspecto meramente jurídico, diferentes tipos de principios y preceptos que regulaban la vida del imperio de Roma desde que éste fue fundado por Rómulo hasta que el pueblo cayó en manos de los bárbaros, y se formó España, Italia y la Galia meridional. Estos principios regían sobre prácticamente todos los aspectos de la vida del pueblo, desde las propiedades, herencias, relaciones entre familiares y comercio, por mencionar algunos de ellos.
El derecho romano era un derecho totalmente tradicionalista que buscaba la forma de conservar las instituciones jurídicas de generación en generación, no buscaba impedir la creación de nuevas organizaciones, pero protegía las que ya existían. Tenía pluralidad de fuentes por lo que se tuvo que estratificar y hacer una división entre los sistemas que ya existían reduciendo un poco las fuentes de producción. Se basaba en tres preceptos diferentes, los cuales habían sido enunciados por Domicio Ulpiano, éstos eran que: se debía de vivir de forma honesta y moral, no se debía de ocasionar daños a otras personas y que cada persona debía de cumplir la ley y reconocer el derecho del otro. Fue un derecho sumamente formalista que daba mucha importancia a la interpretación de este. Era estricto y era aplicado tanto a esclavos, peregrinos y extranjeros.
La historia más antigua de la ley romana se ha perdido. Roma ya existía como una ciudad durante el siglo VIII a.C. La primera fuente conocida de la ley romana son las Leyes de las Doce Tablas que se originaron a mediados del siglo V a. C. Después del período de los reyes, dos cónsules y el Senado gobernaban Roma. Muy pocas personas sabían algo de la ley antes de que las Doce Tablas fueran erigidas para proporcionar algo de seguridad legal. El pretor, uno de los magistrados romanos, publicaba cada año su edicto en el que anunciaba cómo aplicaría las leyes. Los censores tenían una tarea legal, también, la defensa de las costumbres. Durante el principado, los juristas estuvieron activos, entre ellos Ulpian, Papinian, Paul y Julián. El misterioso Gaius escribió un libro de derecho introductorio, los Institutos, casi el único manual que logró sobrevivir. Durante ese tiempo el emperador Theodosian intentó imponer algún orden legal con su código de ley. Los decretos imperiales fueron recopilados y editados en un nuevo Código.
Las etapas del derecho romano son las siguientes:
El derecho humano tiene una pluralidad de fuentes por lo que tuvo que estratificarse, las principales son:
El término obligación proviene de la palabra latina “ob-ligae”, que quiere decir enfrentar a una persona frente a la otra. Es un vínculo jurídico en el cual una persona, sea el sujeto activo o el acreedor, tiene derecho a imponer a otra, el cumplimiento de una determinada prestación. Es un derecho que tienen las personas para exigir de otra que se llama deudor, el cumplimiento de una determinada prestación.
El derecho romano tiene una utilidad histórica pues conocer los antecedentes del derecho elevará los conocimientos de este. Debe de ser estudiado como un modelo práctico para elevar los niveles de ciencia y de arte. Es una poderosa arma para estudiar las legislaciones de América y Europa. Es importante para el estudio de la historia y la literatura romana.
Su influencia ha traído una serie de cambios en la historia que lo han vuelto esencial para el derecho actual pues es considerado como la base de prácticamente todas las legislaciones del derecho. Es la base del derecho civil en diferentes países beneficiando los principios de cultura, sociedad, política y economía.
Briceño V., Gabriela. (2018). Derecho romano. Recuperado el 23 febrero, 2024, de Euston96: https://www.euston96.com/derecho-romano/