En el reino animal, podemos encontrarnos con una variedad grande de cazadores. Aunque las especies son muchas, uno podría decir que pocas han logrado destacarse tanto como los felinos. A continuación, describiremos algunas de sus características distintivas.
Los felinos son un grupo de animales que se diferencian por su hocico corto, su cuerpo delgado y su sentidos agudos (entre otros aspectos). Se encuentran diseminados en casi todo el mundo, con excepción de algunos territorios. Algunos ejemplos los podemos encontrar en el tigre, el león, el guepardo y el gato doméstico.
Es un grupo de animales mamíferos y carnívoros. Es muy raro encontrarse con algún felino que coma algo que no sea carne, sobre todo, la carne de las presas por las que la criatura siente predilección.
Se diferencian de otros mamíferos por un hocico reducido, un cuerpo delgado y grácil, garras retractiles y sentidos (de la vista, del oído) sumamente aguzados.
Son depredadores por excelencia, poseyendo mecanismos de caza altamente eficaces.
Aunque es una familia con gran número de especies (40, aproximadamente), muchas de ellas se hallan bajo la amenaza de la extinción. Esto se debe, principalmente, a la acción del ser humano sobre estas criaturas (cazas, tala de árboles y destrucción de hábitats).
Son unas especies que pueden localizarse en gran parte del globo terráqueo. Los únicos sectores donde no puede encontrarse felinos es en Oceania, las zonas árticas y algunas islas del planeta.
“Felino” es una palabra cuyos orígenes se encuentran en “Felinus”, palabra latina. Esta, en realidad, resulta de una composición que involucra “feles” e “inus”. La primera de estas nos remite a “gato salvaje”, y la segunda de estas indica algo procedente de “viperino”, “leonino” y “adivino”.
Siguiendo su evolución histórica, se sabe que los felinos tienen un origen en común con los caninos (perros). Esto se dice ya que, en tiempos prehistóricos (Oligoceno), existió una familia conocida como los miácidos. Ahora ya están extintos, pero estos tenían ciertas características que aun hoy son recordadas, como los famosos “dientes de sable”. Su expansión fue veloz, y poco a poco, de estos grupos fueron tomando lugar los felinos tal como hoy los conocemos.
En la familia felidae, podemos encontrarnos con una clasificación un tanto extensa. Pero, a fines didácticos, la podemos reducir a la siguiente presentación:
Entre las especies que podríamos numerar sobre los felinos, tenemos a los siguientes casos:
Se sabe que es una de las familias con mayor expansión en todo el globo terráqueo. No obstante, aunque podamos encontrar felinos en sectores ecológicamente tan inhóspitos como los son las ciudades y urbanismos (los gastos encuentran allí un hogar), es más común verlos en bosques. Los podemos, también, hallar en desiertos, selvas, sabanas y sectores montañosos.
Su alimentación es carnívora. Pueden alimentarse de otros mamíferos más pequeños (como pueden ser el caso de algunos ratones), o de otros animales de mayor tamaño (como bien vendría siendo el bufalo, la gacela o el bisonte). Hay que resaltar que su dieta se basa, preferentemente, en animales que son cazados por estos felinos. Es decir, tienen preferencia sobre las presas vivas (no tienen inclinación hacia la carroña). También hay que destacar que los felinos ingieren hierbas y plantas solo con el fin de hacer limpieza estomacal.
Se sabe que los felinos, como cualquier mamífero, son vivíparos. Por regla general, encuentran su periodo de gestación entre finales de invierno y principios de la primavera (esto, solo como lapso referencial). En una camada pueda tener hasta seis crías, aunque esto puede depender, también, de la especie que tratemos. Se sabe, también, que aunque el macho pueda tener disposición para la reproducción todo el año, su participación en la crianza de la descendencia es poca. De hecho, en algunas especies, es tarea de la madre proteger activamente, incluso, de ataques del macho procreador.
Debemos entender que felino es depredador. Esto quiere decir que son, precisamente, uno de los eslabones más importantes dentro de la cadena alimentaria. Un ecosistema no tiene la posibilidad de existir sin que dentro de el exista un elemento regulador de los depredadores, los cuales evitan la expansión indiscriminada de otras especies. Los felinos son, precisamente, depredadores por excelencia; su evolución ha permitido que devengan entre los cazadores más eficaces de la naturaleza.
Al principio de este artículo, se dijo que entre los felinos existen algunas especies que se hallan en peligro de extinción. Algunos de ellos vendrían siendo:
Entre los ejemplos que podemos rescatar de este curioso grupo de animales, tenemos a los siguientes:
Calderón, Grecia. (2019). Felinos. Recuperado el 23 febrero, 2024, de Euston96: https://www.euston96.com/felinos/