Georges Méliès fue un polifacético cineasta francés. Ilusionista, humorista, director de teatro, escenógrafo, actor, técnico, dibujante, caricaturista, pintor, escritor. Conocido como el genio del cine por ser la persona que convirtió este arte en un maravilloso espectáculo. Conozcamos parte de su historia.
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Georges Méliès fue un director y productor del cine francés, quien trabajó arduamente para hacer de la cinematografía un gran éxito. Su actitud visionaria lo llevo a poner en práctica numerosos proyectos técnicos y narrativos que impactaron en la naciente industria. Fue un apasionado de la fantasía, característica que lo ayudó a conferir contenido y sentido al cine, hasta convertirlo en un prolífico productor. Realizó más de 500 películas, la mayor parte comedias jocosas y de tono relajado. Transformó la imagen en movimiento, logrando un sorprendente espectáculo.
Nació el 8 de diciembre de 1861 en París. Hijo de un afamado dueño de empresas del calzado. Sus primeras inclinaciones fueron artísticas, demostrando destrezas como dibujante, pero fue enviado por sus progenitores a Londres para aprender inglés. Fue allí donde Georges Méliès descubrió su pasión por la magia y el ilusionismo.
Al regresar a su ciudad natal, por disposiciones familiares contrarias a sus deseos, empezó a trabajar en sus negocios. Contrajo nupcias con Eugénie Génin, y procreó dos hijos. Al morir su padre se retiró de las empresas Méliès. La herencia recibida la utilizó para adquirir, en 1888, el teatro Robert Houdin, lugar donde había practicado por largo tiempo sus pericias de ilusionista.
Para 1895 ya era su director, e inició el uso de la cámara para relatar historias de ficción. En diciembre del mismo año, en compañía de los hermanos Lumière, presenció la primera representación del Cinematógrafo. La experiencia lo dejó maravillado a tal punto que prontamente su genial imaginación empezó a crear múltiples historias.
En 1899 realizó su primer largometraje (L’Affaire Dreyfus), y en 1902 Viaje a la luna. Para 1912 tenía unos 500 filmes. Tuvo éxito, pero no fortuna. Su incapacidad para la producción masiva, el monopolio de la industria cinematográfica y el inicio de la Primera Guerra Mundial, acabaron con su negocio. Llegó a vender juguetes para subsistir. En 1923 se despidió del cine, pero no de la magia y la fantasía.
En 1925 Georges Méliès vivió dos sucesos trascendentales: A los 64 años se volvió a casar, esta vez con Jeanne D’Alcy. A nivel profesional su trabajo fue revalorado por la nueva visión surrealista de la cinematografía francesa. En 1929 logró realizar la Gala Méliès y ocho de sus películas fueron proyectadas en la sala Pleyel. El 21 de enero de 1938, murió el mago del cine Georges Méliès.
Finalizando el año 1937, Georges Méliès regresó a Francia muy quebrantado de salud y en precarias condiciones económicas; padecía un cáncer que lo consumía. Al año siguiente, con 76 años de edad, muere en su ciudad natal internado en un hospital. Fue enterrado en el cementerio de Père Lachaise.
Georges Méliès es destacado como un gran inventor en la industria cinematográfica. Su prodigiosa imaginación y visión futurista le permitieron crear múltiples técnicas y trucos fundamentales en los inicios del cine.
Uno de los mas nombrados fue el stop trick que significa truco de parar. Es un efecto especial que consiste en hacer desaparecer un objeto a la vista del espectador de la película. Se logra apagando la cámara durante la filmación del objeto, este se retira del foco y luego se continúa grabando. Lo descubrió casualmente pero lo convirtió en un gran recurso.
En 1897, el gran visionario edificó en Montreuil un estudio de filmación, primero en toda Europa y único en su estilo. Entre sus innovadoras técnicas y recursos creados para imprimir fantasía a sus historias y deslumbrar a los espectadores, destacan:
Fueron más de 500 películas, la gran mayoría cortometrajes, realizadas hasta el año 1912. Desde esta fecha, por cuestiones financieras, le fue imposible continuar produciendo.
Se destaca por los efectos especiales, la excelente escenografía y el fantástico vestuario. La conjugación de todos estos elementos produjo una de las escenas más representativas en la historia del arte cinematográfico.
El mayor reconocimiento para este célebre personaje fue ser destacado como el genio del cine. Su invaluable obra es ampliamente conocida por los ingeniosos aportes a la narrativa cinematográfica. Sin dudas, constituyen un fundamento para el desarrollo de este maravilloso arte.
La historia de este grande del cine está rodeada por una serie de hechos particulares. Uno de ellos fue la negativa de Antoine Lumière, inventor del cinematógrafo, de venderle el equipo por considerarlo una inversión sin futuro ni factibilidad de éxito. Cuan equivocado estaba. El visionario Georges Méliès compró otro aparato, lo transformó en cámara e hizo su primer filme “Partida de naipes”.
En sus películas de ficción e ilusionismo plasmó eventos que se hicieron realidad mucho tiempo después, como la llegada del hombre a la luna, hecho ocurrido 67 años más tarde. En “Fotografía eléctrica a distancia” (1908), imaginó la televisión del futuro.
Su famosa película “Viaje a la Luna” fue copiada por otras personas y comercializada exitosamente por toda América del Norte. Sin embargo, nunca recibió ganancias, a pesar de haber sido el productor, director y actor.
Tras su derrumbe económico, en un momento de impotencia y furor, quemó casi todas las películas y equipos de trabajo. Sus últimos años los vivió sin dinero ni hogar propio, en una casa de jubilación llamada el Castillo de Orly.
Castro Del Valle, Laura Isabel. (2020). Georges Méliès. Recuperado el 23 febrero, 2024, de Euston96: https://www.euston96.com/georges-melies/