Interculturalidad

En el contexto actual de globalización, nuestro entorno cultural experimenta cambios convirtiéndose cada vez más diverso. La diversidad cultural es una condición esencial en la sociedad humana y necesita ser desarrollada y manejada de forma apropiada para evitar problemas de entendimiento y de tolerancia que pueden acarrear problemas, tales como la discriminación, la xenofobia, los estereotipos, entre otros. En principio, no existe una cultura mejor que otra. Al contrario, una cultura evoluciona cuando interactúa con otras culturas que pueden provenir de contextos lingüísticos y socioculturales diferentes. Sin embargo, es importante que este contacto tenga lugar de una forma respetuosa y es allí cuando entra en juego, la noción de interculturalidad.

Temas relacionados

Diversidad cultural, estratificación social, transculturación

¿Qué es la interculturalidad?

La interculturalidad puede definirse como el conjunto de relaciones e interacciones que tienen lugar de manera intencional entre culturas diferentes con el fin de promover el dialogo, el respeto mutuo y la consciencia de preservar la identidad cultural de cada individuo. Cabe señalar, que este concepto no solo alude a las relaciones que se desarrollan entre individuos pertenecientes a diferentes países o regiones del mundo, también toma en cuenta a individuos que se encuentran dentro de una misma comunidad pero que poseen características diferentes desde el punto de vista étnico, social o de otra índole.

Cabe señalar que el prefijo “inter” del término “interculturalidad” indica la relación y las interacciones entre grupos, individuos, identidades. Siendo así, este prefijo, unido al vocablo cultura, hace referencia a un sentido de reciprocidad entre las culturas.

En qué consiste la interculturalidad

La interculturalidad consiste en la interacción respetuosa entre personas pertenecientes a entornos culturales diferentes. Esta interacción tiene lugar en igualdad de condiciones y supone la habilidad para comunicarse con el otro, desde el conocimiento y la compresión de su cultura. De este modo, la interculturalidad contribuye a la integración, la solidaridad y la convivencia entre individuos.

Para qué sirve

• Para la comprensión de las diferencias interculturales lo cual ayuda a evitar malentendidos y a tener una comunicación eficaz.
• En el ámbito empresarial, la interculturalidad es muy útil para adaptarse a los entornos profesionales diferentes. La competencia intercultural favorece el trabajo en equipos multilingües y multiculturales.
• Para comprender la cultura del otro manteniendo una coherencia con su propia cultura.
• Para abrirse a nuevas formas culturales y percepciones de la realidad sin que ello implique dejar de lado la identidad propia.

Características de la interculturalidad

La interculturalidad puede adoptar diferentes formas y constituye por lo general, una experiencia enriquecedora. El contacto con otras culturas puede representar una oportunidad única para reflexionar sobre la propia cultura y el mundo.

Por otra parte, debe existir un reconocimiento mutuo ya que éste permitirá al individuo reconocer al otro como otro y aceptándolo tal como es. Se trata de adoptar una postura de apertura y tolerancia hacia la identidad del otro.

Objetivos

En términos generales, el objetivo de la interculturalidad es aprender a convivir de manera pacífica y constructiva en un mundo multicultural. Además, el dialogo intercultural puede ser una herramienta de valor para la prevención y la resolución de conflictos y para fomentar el respecto de los derechos humanos.

Otros objetivos que se pueden mencionar en cuanto a la interculturalidad, es el hecho de compartir las percepciones del mundo con el fin de comprender y aprender de aquéllos que perciben el mundo de una forma distinta a la propia. Asimismo, la comunicación intercultural contribuye a manejar la diversidad cultural de una forma democrática y a desarrollar proyectos de forma conjunta.

Proceso

La interculturalidad es un proceso a través del cual individuos de diferentes culturas interactúan para aprender tanto de su propia cultura como de la cultura de otros.

Es importante tomar distancia de las creencias propias, sin rechazarlas y aprender a objetivar el sistema de referencias de la cultura propia. Asimismo, es importante ponerse en el lugar del otro y desarrollar la empatía hacia el otro. Aprehender una cultura significa proyectarse desde otra perspectiva. Sin embargo, cabe destacar que no se debe generalizar ni reducir la cultura del otro a un conjunto de estereotipos.

Finalmente, se debe superar los prejuicios y tratar de comprender al otro y a su forma de percibir la realidad. Eso permitirá decodificar de forma correcta los mensajes emitidos por el otro. Por supuesto, es importante estar dotado de una serie de conocimientos que permitirán entender el comportamiento del otro.

Importancia de la interculturalidad

La interculturalidad puede ser un medio para desarrollar la formación ciudadana ya que esta permite la adquisición de valores tales como el respecto al prójimo y la tolerancia con el fin de vivir en sociedad de manera armoniosa.

Además, la diversidad cultural lejos de ser un inconveniente, es una riqueza. Prueba de ello, podemos verlos en potencias como Estados Unidos, que han sabido sacar provecho del aporte de las diferentes culturas que allí convergen.

En el ámbito comercial, poseer habilidades interculturales es actualmente muy importante por diversas razones. Las empresas no solo desean que sus empleados posean una mejor comprensión de su lugar de trabajo y de sus colegas, sino que además, éstos tengan la capacidad para adaptarse a nuevos entornos laborales y prevenir choques culturales.

Frases sobre la interculturalidad

“La interculturalidad se refiere a la presencia e interacción equitativa de diversas culturas y la posibilidad de generar expresiones culturales compartidas, adquiridas por medio del diálogo y de una actitud de respeto mutuo.” (Unesco)

“El mundo cambia si dos miran y se reconocen” (Octavio Paz)

“Hay sociedades multiculturales, pero aún no existen sociedades interculturales” (Elizabeth Flores)

“Si no podemos poner fin a nuestras diferencias, contribuyamos a que el mundo sea un lugar apto para ellas” (John Fitzgerald Kennedy)

“Estoy convencido que el porvenir le pertenece a la no violencia, a la conciliación de culturas diferentes” (Stéphane Hessel)

Ejemplos

México

El modelo educativo implementado en algunas universidades mexicanas constituye un buen ejemplo de interculturalidad. En efecto, México cuenta con 12 universidades interculturales que se centran en las comunidades indígenas y en las áreas estratégicas claves para promover el desarrollo de las mismas. Es importante recordar que en este país existe una gran población indígena.

Ecuador

El 40% de la población ecuatoriana está conformada por comunidades indígenas dentro de la cual se distinguen 14 nacionalidades. En efecto, en el Ecuador, se hablan catorce idiomas. Siendo así, dentro de un mismo país, hay una diversidad de formas culturales que convergen y que se enriquecen mutuamente. Por otra parte, Ecuador ha creado un sistema educativo indígena “bilingüe intercultural”.

Chile

En Chile, se ha implementado un programa de educación intercultural, una medida que tiene la intención de que se reconozca la cultura de los mapuches (pueblos originarios de Chile), en especial, la lengua mapuche, en una sociedad en la cual domina la cultura chilena. Sin embargo, según el Instituto Nacional de Derechos Humanos, aún existe rechazo hacia los mapuches por parte de los chilenos. En efecto, la percepción que existe sobre los mapuches es por lo general negativa. En este caso, un dialogo intercultural autentico es necesario para el reconocimiento y la convivencia con el otro.