El maniqueísmo es distinguido por ser una corriente filosófica, sin embargo, se han encontrado antecedentes antiguos que corroboran que no solo fue una doctrina, sino que también fue una secta que tuvo sus momentos de apogeo.
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Es una doctrina o corriente filosófica, que paulatinamente se terminó de convertir en una secta que profesa la religión universalista propuesta por el fundador de dicha doctrina, siendo esta religión un compendio que se mantiene abierto a todas las personas sin importar su identidad espiritual o religiosa, esta entonces aceptaba diversidad cultural, racial o nacional, el origen étnico se desplaza en esta religión universalista uniendo a toda la población, observándola como un solo cuerpo.
Esta doctrina expone la fe veraz y total puesta en dos polos opuestos, los maniqueístas creían ciegamente en que en el purgatorio, es decir la tierra, se libraban batallas diariamente entre dos extremos uno malo y otro bueno.
El polo bueno se refería al paraíso, la luz, el cielo, toda la bondad y lo benefactorio posible, por el contrario el polo malo representa la oscuridad, las tinieblas, toda la vanidad y los pecados a punto de consumarse, el inframundo, Satanás y demás; aunque para la época cada polo tenía un nombre especifico, la luz era concebida como Ormuz y la oscuridad se distinguía como Ahrimán.
Este tipo de pensamiento en la filosofía del maniqueísmo como producto final implantó en los individuos la idea errónea que planteaba el cuerpo se dividía en dos, tal como el yin y el yang para los maniqueístas el cuerpo humano está dividido en luz y oscuridad, siendo esto una predisposición a que el espíritu que conforma el cuerpo es un don de Dios, mientras que el cuerpo es el pecado y la tentación otorgada por Lucifer.
No por nada existe el dicho la carne es débil, no se refiere a debilidad en sí, sino a que por la carne se flaquea en el camino de la vida, la carne media las cosas malas y buenas y en su mayoría comprime las malas y suprime las buenas, siendo esto un factor almático que ocasiona los constantes errores que comete una determinada población.
Esta doctrina fue fundada durante el siglo III en Babilonia por el príncipe persa Mani, en algunos casos llamado Manes, que a su vez era filósofo, a eso se debe el nombre de la secta, el fundador del maniqueísmo profesaba que él era el último profeta enviado por Dios a la humanidad, llamándose de esta manera discípulo directo o enviado lineal del todopoderoso.
Este proponía la existencia de dos máximas deidades que controlaban todo, el bien y el mal, Dios y Satán, aportando de igual manera que el cuerpo se dividía en dos partes en igualdad de porcentajes de luz y oscuridad.
Esta secta tuvo una gran difusión y se expandió a través del Imperio Romano, pasando por el Oriente hasta llegar a China por la cuenca del rio Tarim, el cual se podría decir que es uno de los ríos más importantes de Asia Central, se puede decir que el maniqueísmo aprovecho la ruta de seda para agilizar su expansión, refiriéndonos a ruta de seda como una de las redes de comercialización más relevantes de china.
Príncipe persa Manes.
El maniqueísmo en sí no tiene símbolos que lo identifiquen, o algún objeto sagrado, este se mueve y se imparte según la ideología principal, sin ningun tipo de objeto intermediario.
El único fundamento en el que se basa el maniqueísmo es el ya antes expuesto, los polos opuestos que coexisten en contaste lucha de posesión, tanto en la tierra como en el propio cuerpo del ser humano.
Actualmente son contados los pensadores que siguen la filosofía maniqueístas, no obstante, si ahondamos en diversas religiones como el catolicismo aún sigue latente el pensamiento dual en el cual se libra constantemente una batalla, por parte del cristianismo en este acepta que se libran batallas, mas no se le da crédito a la teoría de que el cuerpo es de satanás, ya que los impulsos de la carne se pueden controlar mediante el espíritu y el alma, ya que somos seres tripartitos.
El maniqueísmo aunque no fue una doctrina muy certera, en su época desencadeno muchos factores positivos que en parte cooperaron con el desarrollo social, gracias a este se desvanecieron los muros limitantes que dividían una religión de otra y una cultura de otra, agrupando a todas las etnias con un solo objetivo sobrellevar las luchas que se libraban cotidianamente entre el bien y el mal; aunado a ello, esta corriente dio pie a muchas teorías religiosas.
Calderón, Grecia. (2018). Maniqueísmo. Recuperado el 24 febrero, 2024, de Euston96: https://www.euston96.com/maniqueismo/