Microscopio

La ciencia y la tecnología siempre han estado de la mano y han continuado avanzando a lo largo de la historia. Para ello, se han creado diferentes tipos de aparatos que han ayudado en la labor, uno de los más importantes se conoce con el nombre de microscopio, un aparato que logró permitirle al hombre observar formas de vida microscópicas para lograr entender la naturaleza y que se utilizó con el paso del tiempo en diferentes disciplinas científicas.

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¿Qué es un microscopio?

El microscopio es un tipo de instrumento que hace posible la observación de objetos que son muy pequeños como para poder ser vistos con el ojo humano. Es un tipo de instrumento óptico que puede aumentar la capacidad de análisis a niveles sorprendentes.

Características de un microscopio

Algunas de las características más representativas del microscopio son las siguientes:

• Es un tipo de herramienta que permite la observación de objetos diminutos.
• Funciona por medio de la refracción de las imágenes.
• Están compuesto por uno o varios lentes que conforman todo un sistema óptico.
• Algunos de ellos contienen una base que les da la capacidad de realizar una serie de movimientos muy precisos con el objetivo de medir objetos.
• La disposición en la que se encuentran los lentes del microscopio cuenta con una secuencia que hace posible que la orientación de la imagen que se ve pueda invertirse en relación con el objeto real que se está examinando.
• Dos los principales parámetros que forman parte de los microscopios son la capacidad de aumento y la de resolución.

Historia

De acuerdo con la historia, el primer tipo de microscopio que existió fue el óptico el cual basaba su funcionamiento en la propiedad que tenían diferentes materiales que producían un cambio en la dirección de los rayos de luz. A partir de ese momento, se empezaron a fabricar diferentes tipos de lentes especiales que hicieran posible mejorar esa convergencia de luz generando así una imagen aumentada de cualquier tipo de objeto.

Antes de su invención, existieron primero las lupas, aparatos que incluso hoy continúan utilizándose. Roger Bacon, en el siglo XIII, se encargó de analizar y estudiar las lupas y de realizar una serie de investigaciones que resultaron en la creación de herramientas diferentes para mejorar la ampliación de los objetos. Como tal, el microscopio se origina en el año 1590 y en el año 1674, Antón Van Leeuwenhoek se encarga de comercializar y perfeccionar la creación, de hecho, es considerado como la persona que descubrió los glóbulos rojos y las bacterias en la sangre.

Galileo Galilei también tuvo una importante participación en la elaboración y mejora de los microscopios con su creación de un lente convexo y otro lente cóncavo. La primera persona en utilizar el término microscopio fue Giovanni Faber en el año 1625. En el siglo XVII, empiezan a aparecer investigaciones que mostraban documentaciones relacionadas con diferentes observaciones hechas con los microscopios, por ejemplo, Micrographia, escrita por Robert Hooke y publicada en el año 1665. Con el paso del tiempo, los microscopios fueron perfeccionándose poco a poco hasta lograr alcanzar los dispositivos que se utilizan en la actualidad. Carl Zeiss es considerado como uno de los fabricantes de microscopios más reconocidos del siglo XIX porque fue el encargado de modernizar por completo todas las herramientas que se utilizaban y de incorporar teorías ópticas que habían sido desarrolladas por Ernst Abbe. En el siglo XX, nuevas técnicas microscópicas surgieron y con ellos también nuevos microscopios por ejemplo el electrónico.

Para qué sirve un microscopio

El microscopio es un mecanismo o aparato que sirve para poder obtener una mejor visibilidad de objetos que tienen un tamaño diminuto haciendo que éstos se presentan de forma aumentada. Con este instrumento es posible aumentar las imágenes hasta alcanzar el nivel de la retina y con ello se permite captar mejor la información. Es tipo de herramienta óptica de mucha importancia y relevancia principalmente para el campo de la ciencia.

Inventor

El inventor del microscopio fue Zacharias Janssen en el año 1590.

Tipos

En la actualidad, además del microscopio óptico existen otros tipos de aparatos que tienen características y funciones distintas. Entre los más importantes y conocidos encontramos:

• Microscopio compuesto: este tipo de microscopio utiliza dos o más lentes para lograr obtener imágenes aumentadas.
• Monocular: en este caso, el microscopio solamente tiene un ocular y por esa razón la muestra solo puede ser observada utilizando uno de los ojos. Es un microscopio bastante sencillo que se utiliza principalmente por los estudiantes o por aquellas personas que disfrutan de la microscopía.
• Trinocular: posee dos oculares que hacen posible observar las muestras pero tienen además un ocular adicional en el cual se puede conectar una cámara para que capte diferentes imágenes de las observaciones que se realizan.
• Digital: posee una cámara que hace posible capturar de forma digital todas las imágenes obtenidas a partir de una muestra para que luego sean mostradas en una pantalla.
• Microscopio invertido: se encarga de invertir la posición en la que se encuentra la fuente de luz y el objetivo a observar para que de esta manera la iluminación se realiza desde arriba. Es muy utilizado para el estudio y observación de las células vivas y los tejidos

Partes

En cuanto a las partes del microscopio, éstas pueden clasificarse dependiendo de su funcionamiento y de su sistema mecánico. De acuerdo con el funcionamiento sistema óptico del microscopio las partes que conforman el aparato son las siguientes:

• Foco: se encarga de emitir los rayos de luz.
• Condensador: tiene la función de concentrar los rayos de la luz sobre la muestra que se quiere observar.
• Diafragma: es el lugar en donde se acopla el condensador y se encarga de regular la cantidad de luz.
• Objetivo: es una parte fundamental compuesta por un grupo de lentes que reciben la luz que proviene de la muestra haciendo posible que la imagen se aumente.
• Ocular: tienes la función de ampliar la imagen y gracias a ella se puede observar la muestra por completo.

En cuanto al sistema mecánico, las partes se clasifican dependiendo de la proporción del soporte estructural necesario para mantener las partes anteriormente citadas. Se clasifica en las siguientes partes:

• Base: se encarga de mantener el microscopio en una posición estable.
• Brazo: es una estructura que conecta a la base con el sistema óptico del microscopio.
• Platina: consiste en una pieza horizontal en donde se colocan las muestras que van a ser observadas.
• Tornillos micrométricos y macrométricos: funcionan regulando la posición del brazo y la platina.
• Revolver: en esta parte se localizan los objetivos y tienen la capacidad de poder girar.
• Tubo: tiene la función de conectar los objetivos con el ocular.

Cómo funciona un microscopio

Primeramente, para utilizar el microscopio se debe de preparar el objeto que será sometido a observación y esto se realiza colocándolo sobre una lámina de vidrio conocida con el nombre de portaobjeto, luego, deberá de ser cubierta con otra lámina más delgada conocida como cubreobjetos y en caso de ser necesario deberán de ser aplicados ciertos tintes para identificar lo que se necesita.

El microscopio de tipo óptico funciona principalmente dependiendo y tomando en cuenta las diferentes propiedades que tiene la materia con relación a los rayos de luz, depende además de la combinación adecuada de lentes especiales para poder dirigir o converger los rayos de luz y de esa manera lograr obtener una imagen que tenga un mayor tamaño. La lente que se encuentra en el objeto tiene la función de producir una imagen aumentada mientras que la imagen que se produce, es ampliada por medio de los lentes del ocular haciendo que se cree una imagen virtual más grande del objeto.

En el caso de los microscopios electrónicos, éstos funcionan por medio de una serie de electrones que sirven para darle forma a las imágenes. La columna del microscopio servirá para emitir los electrones, la cámara para aislar el objeto y el monitor para lograr observar el resultado final.

Importancia

La importancia que tiene el microscopio en el campo de la ciencia es sumamente extensa. Fue un punto de partida que logró que se realizaran y surgieran una gran cantidad de avances a científicos nivel mundial en el campo de la ciencia y que cambiaron la manera en que el hombre veía el mundo. Es importante porque abrió la posibilidad de realizar estudios sobre organismos diminutos como los microbios y las bacterias lo que hizo posible analizar y diagnosticar cientos de enfermedades.

En la actualidad, los microscopios quirúrgicos por ejemplo, son ampliamente utilizados para realizar diferentes tipos de cirugías en las cuales, los tejidos son tan delicados que los médicos necesitan lograr aumentar la visión para evitar producir algún tipo de daño, por ejemplo los vasos sanguíneos, nervios y venas. La utilización de los microscopios ha servido por décadas para el estudio de enfermedades importantes como lo son el Parkinson y el Alzheimer e incluso ha permitido realizar los estudios de virus y sus estructuras moleculares.

No solo en el campo de la medicina es importante el microscopio pues ese aparato también es utilizado en la resolución de algunos conflictos legales, específicamente en áreas relacionadas con la criminalística en donde necesitan realizar una serie de reacciones químicas para lograr interpretar resultados.