Giovani di Petro Bernardore mejor conocido como San Francisco de Asís fue un importante y reconocido hombre religioso y músico italiano a quien se le atribuye la formación de la orden franciscana, un movimiento de renovación de la fe cristiana que se enfocó en al amor a Dios, en la atención a los pobres y en la fraternidad. Su figura es, incluso hoy en día, valorada por ser considerada como una de las más importantes manifestaciones de la vida espiritual cristiana.
San Francisco de Asís fue un reconocido diácono de la iglesia católica fundador de la Orden Franciscana, de las Hermanas Clarisas y de la orden seglar por medio de las cuales logró llevar el evangelio a los más necesitados y a los enfermos.
San Francisco de Asís nació en Italia, no se conoce exactamente el día de su nacimiento pero se establece como año de su nacimiento el final de 1181 o el inicio de 1182. Su padre Pietro Bernardone dei Moriconi era un comerciante de telas muy próspero y su madre Donna Pica Bourlemont quien se dedicaba por completo a educar y formar a San Francisco de Asís.
Aprendió latín de niño y en su época de juventud se caracterizó por andar con amigos y por gastar dinero sin pensar, le gustaba ir de paseo y las reuniones con amigos, sin embargo, nunca dejó de lado el ayudar a los pobres o a los necesitados. Fue encarcelado en el año 1202 pues había formado parte de un altercado entre Asís y Perugia. En este tiempo, se dio cuenta de lo insatisfecho que estaba por su estilo de vida y empezó de esta manera a madurar espiritualmente.
En el año 1206, mientras estaba en un templo en la ciudad de San Damián, tuvo su primer visión en la cual escuchó a Jesucristo decirle: “ve, repara mi iglesia. Como ves, está en ruina”. A partir de ese momento, empezó su obra. Su padre se resistió al cambio y por esta razón, llevó a su hijo ante el obispo para que renunciara a su herencia. Francisco entonces, se despojó de su ropa y renunció a todo por amor a Dios.
Al cumplir los 25 años decidió irse de la ciudad y emprendió su viaje hacia Gubbio en donde trabajó ayudando a los enfermos de lepra. Posteriormente viajó de nuevo a Asís en donde restauró las iglesias de San Damián, San Pietro In Merullo y Santa María de los Ángeles. Fue el 24 de febrero del año 1209 que escuchó el llamado indicándole que debía ir al mundo a hacer el bien. Según cuenta la historia, San Francisco de Asís recibió los estigmas de Cristo en su cuerpo en el año 1224, luego de haber realizado un tiempo de ayuno y de oración. Sus últimos años los vivió en Asís y padeció de ceguera y dolores fuertes, sin embargo, esto nunca lo alejó de su amor a Dios. Falleció un 3 de octubre del año 1226.
Varios milagros se atribuyen a San Francisco de Asís entre ellos sanación al leproso y liberación del mismo de un demonio que le atormentaba, la transformación de los tres ladrones, un milagro con aves y un encuentro con un animal salvaje a quién logró vencer únicamente con oración.
Su pensamiento se basó siempre en el honor, el respeto y el amor al prójimo, era considerado como un hombre de verdadera acción, simple ante la vida y fiel a Dios.
Entre sus principales aportes se mencionan:
Fue canonizado un 16 de julio de 1228 por Gregorio IX quien viajó hasta Asís. La celebración se realizó en la iglesia de San Jorge ante obispos, cardenales y sacerdotes, hermanos franciscanos y hermanas clarisas.
Fue nombrado de esta manera por su gran conexión especial con los animales. De acuerdo con la historia, todos los animales se detenían a escucharlo y seguían incluso sus órdenes. Su amor por toda la naturaleza llevó a la Organización Mundial de Protección Animal a establecer el día de su muerte como el Día Mundial de los Animales. Fue nombrado además por el Papa Juan Pablo II, como el Patrono de los Animales y de todos los ecologistas.
Muchas de las obras de San Francisco de Asís se han perdido con el tiempo y se basan principalmente en el espíritu y el ideal que compartían los franciscanos. Entre sus principales obras se mencionan las siguientes:
Algunas de las frases más importantes mencionadas por San Francisco de Asís se mencionan a continuación:
El día en que se conmemora a San Francisco de Asís es el 4 de octubre de cada año.
Su oración es conocida por todo el pueblo católico y es llamada también oración simple, de hecho, se utiliza en todo el mundo. Forma también parte de algunas instituciones de ayuda como por ejemplo, Alcohólicos y Anónimos. La oración dice lo siguiente:
Oh, Señor, hazme un instrumento de Tu paz.
Donde hay odio, que lleve yo el amor.
Donde haya ofensa, que lleve yo el perdón.
Donde haya discordia, que lleve yo la unión.
Donde haya duda, que lleve yo la fe.
Donde haya error, que lleve yo la verdad.
Donde haya desesperación, que lleve yo la alegría.
Donde haya tinieblas, que lleve yo la luz.
Oh, Maestro, haced que yo no busque tanto ser consolado como consolar;
ser comprendido como comprender;
ser amado como amar.
Porque es:
Dando que se recibe;
Perdonando que se es perdonado;
Muriendo, que se resucita a la
vida eterna.
La importancia de San Francisco de Asís radica en la manera en la que se despojó de sus riquezas con el único objetivo de poder predicar el evangelio predicando siempre la humildad, la obediencia y la entrega a la fe. Predicó sobre la pobreza como un valor y propuso de esta manera una forma de vida más sencilla siempre basada en los evangelios. Fue un hombre que sirvió de modelo para la vida cristiana y religiosa. Además, fue el fundador de la orden religiosa llamada los franciscanos la cual se dedicó a hacer el bien a enfermos y necesitados.
Briceño V., Gabriela. (2020). San Francisco de Asís. Recuperado el 23 febrero, 2024, de Euston96: https://www.euston96.com/san-francisco-de-asis/