Las estrellas también tienen un ciclo de vida y mueren tras el cese de su actividad termonuclear, que genera una explosión de su masa al espacio interestelar; en esta etapa final la estrella pasa a ser llamada supernova.
Temas relacionados
Agujero blanco, agujero de gusano, agujero negro, estrella, galaxia, nebulosa
Las supernovas son explosiones estelares que ocurren al finalizar la vida de una estrella. Esto libera gran cantidad de energía, materiales pesados, polvo y gas, producto del agotamiento del combustible nuclear que da paso al cese de las reacciones termonucleares.
Una supernova es una explosión estelar que libera elementos pesados, polvo y gas. Este proceso ocurre al final de la vida de una estrella.
Las supernovas se forman cuando una estrella muere, aunque no todas las estrellas se pueden convertir en supernovas, son las estrellas gigantes las que pueden convertirse.
La primera teoría sobre la formación de las supernovas explica, que el proceso comienza cuando por falta de combustible en el núcleo, se dejan de generar reacciones termonucleares. Esto conlleva a que la presión del núcleo disminuya y el núcleo se contraiga de forma abrupta, se caliente y colapse, emanando energía.
Otra teoría habla de los sistemas binarios de estrellas, este es un proceso más violento y sucede cuando una enana blanca recibe masa de su compañera, ésta masa debe ayudar a sobrepasar el límite de Chandrasekhar. Esto genera una compresión interna que dispara las reacciones termonucleares y hace estallar a la enana blanca, que por lo general se lleva por delante a su hermana; rara vez quedan restos de su compañera.
La explosión de una supernova generada por el agotamiento de combustible en su núcleo, genera el cese de su gravedad y la irradiación de los residuos estelares compuestos por elementos pesados, polvo y gas.
La temperatura de las supernovas varía dependiendo de su masa y la energía de su núcleo. Una supernova tipo II típica puede llegar a los cien mil millones de grados centígrados y cuando colapsa su núcleo puede llegar a los tres mil millones de grados. La supernova 1987A llegó a los 48 mil millones de grados centígrados y fue el objeto más caliente medido en el universo.
La importancia de las supernovas radica en que estas han aportado materiales pesados al medio interestelar, lo cual es imprescindible para la formación y evolución de los planetas y los seres vivos.
Calderón, Grecia. (2018). Supernova. Recuperado el 24 febrero, 2024, de Euston96: https://www.euston96.com/supernova/